El Elche Club de Fútbol que dirige Sebastián Beccacece no pudo enlazar su tercera victoria consecutiva en casa, pero confirmó que está en un buen momento tras igualar a uno con el Sevilla de Mendilíbar, finalista de la Europa League.
Un Elche que en las últimas cinco jornadas ha ganado dos encuentros, ha empatado otros dos y sólo perdió por la mínima (2-1) ante el Almería. Además, los ilicitanos acumulan tres jornadas seguidas sin conocer la derrota en las que mereció más, tanto en Getafe como ante el Sevilla en un Martínez Valero que congregó a 13.263 espectadores.
La intensidad del Sevilla en el inicio sorprendió al Elche. Eric Lamela firmó el 0-1 en el minuto 9 con un remate raso que superó a Edgar Badía. El pase al primer toque del marroquí En-Nesyri fue medio gol. A partir de ahí el Elche se rehizo y fue de menos a más.
El conjunto hispalense se quedó con diez jugadores en el minuto 17 por una roja directa a Pape Gueye. El africano realizó una entrada muy dura sobre Lucas Boyé y el colegiado castellano-manchego Isidro Díaz de Mera no dudó en expulsarle. El técnico sevillista, José Luis Mendilíbar, no puso excusas y reconoció que «la expulsión fue justa».
El Elche acentuó su dominio y se fue a por el partido. En el minuto 24 un centro desde la derecha de Josan lo remató con el hombro Tete Morente para batir con una bonita parábola al meta del Sevilla, Dmitrovic. Dos remates más de Tete los detuvo muy seguro el meta visitante y un cabezazo de Lucas Boyé no entró por poco.
Beccacece tras el descanso sustituyó a Nico Fernández por Álex Collado para buscar más alternativas ofensivas. Durante la segunda mitad también entraron Pere Milla, Ezequiel Ponce, Raúl Guti y Pol Lirola, pero Mendilíbar ajustó bien su defensa y el Sevilla pudo mantener el 1-1 y sumar un punto que el técnico vasco calificó de «muy bueno».
Por su parte, el entrenador franjiverde felicitó a su equipo por la entrega y la insistencia y remarcó que «los jugadores lo dieron todo; nadie se guardó nada. Valoro mucho como estamos compitiendo. Seguimos siendo muy intensos y hemos mejorado mucho. Además, hay que tener en cuenta que nos hemos enfrentado a un finalista europeo. Queremos transmitir al grupo lo que sentimos por esto: pasión y amor por el fútbol, por el juego».
