El Elche Club de Fútbol que dirige Eder Sarabia continúa generando dudas tras perder los tres encuentros que ha disputado ante equipos de Segunda División. En la última cita de la pretemporada los ilicitanos cayeron 0-1 ante el Levante de Julián Calero. Un golazo desde fuera del área de Pablo Martínez en el minuto 36, ante el que nada pudo hacer Edgar Badía, permitió al conjunto granota conquistar su quinto Trofeo Festa d’Elx.
Las sensaciones no pueden ser más negativas. De nada sirve competir a un buen nivel, trenzar buenas jugadas y dominar el juego en algunas fases del choque si no tienes pegada. Sin gol estás condenado a pelear por la permanencia en una categoría que será más exigente que nunca. La afición franjiverde no puede ser optimista. 7.962 espectadores se congregaron en el estadio Martínez Valero cuyo césped presentaba un aspecto deplorable. Y el domingo 18 de agosto se abre la Liga en casa ante el Huesca a las 19.30 horas.
Eder Sarabia manifestó tras el encuentro que «hemos competido y estuvimos a la altura del partido. Estamos en el proceso de entender ciertos mecanismos, que para mí es importante. El equipo va a competir, será atrevido, generará ocasiones y seremos agresivos sin balón. El objetivo es ganar al Huesca y que en la jornada 5ª seamos mejor que en la 1ª. Con los que tengo en el vestuario y los jugadores que puedan llegar en unos días iremos mejorando y asimilando los conceptos».
Por último, los aficionados realizaron una pitada de protesta contra la gestión del propietario del Elche, Christian Bragarnik, en el minuto 12. Además, la grada cantó «Bragarnik: ¿y los fichajes?» o «Bragarnik vete ya». La planificación está siendo una auténtica pesadilla. Si no se concretan fichajes de futbolistas de nivel este Elche lo puede pasar muy mal esta campaña. Así están las cosas justo cuando han terminado las pruebas. Ahora llega el fútbol de verdad, con tres puntos en juego cada jornada.
